De las cosas que me gustan de la Navidad es que si se la ve más allá del consumo y uno trata de ponerse en la frecuencia de mujeres y hombres que en los últimos 2000 años han entregado su vida en la causa de compartir amor convertido en mejores opciones para la gente de su tiempo, se convierte en tiempo de esperanza.
Jesús de Nazareth anuncia que Dios no es ajeno a la historia, que no se encuentra felizmente instalado en un cielo lejano a las mujeres y los hombres, sino que es un Dios-con-nosotros más que dispuesto a meter el hombro en la causa que se compromete porque un mundo un poco más justo sea posible, en el cual haya inclusión, fraternidad, libertad.
Y me gusta pensar que en el escultismo nos unimos a esa causa: la de la esperanza, la del ser humano que se suma a otros para dejar mejor este mundo que como se le ha encontrado... y lo mejor de todo: ¡lo hacemos jugando, divirtiéndonos y sirviendo!
Feliz Navidad a todos los lectores de los apuntes, con el deseo de que sigamos compartiendo esperanza.
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1 comentario:
pues FELIZ NAVIDAD Rafa y que el señor nos siga guiando para dejar este mundo en mejores condiciones de como nos lo dio.
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