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30.7.08

Un viejo lobo que no motiva, es un pobre viejo lobo

Ahora que ya no soy viejo lobo tengo la oportunidad como secretario de grupo de escuchar a los papás: lo que valoran de sus viejos lobos, pero también las cosas que les parece que no funcionan.

Una queja que escucho con frecuencia es que un niño o una niña ya no quiere ir a la manada, ya no valora mucho ser lobato o lobezna y aun cuando ha comenzado a ausentarse los viejos lobos aparentemente no se enteran, no los llaman a sus casas, no les preguntan por qué ya no quieren ir, no les proponen algo divertido para que regresen.

En otras ocasiones la queja va en la línea de que un lobato y una lobezna se pone a trabajar en su cartilla, van contestando los ejercicios que vienen en ellas o que se han avocado a sus especialidades y cuando llegan con el viejo lobo, las mira de reojo, les contesta con un vago "oh, sí" y no pasa nada. Ni siquiera les entregan sus insignias de especialidad.

Creo que a veces los viejos lobos olvidamos algo que es fundamental: no sólo somos organizadores de actividades para pequeñas y pequeños: somos también motivadores y motivantes.

Todo ser humano, eso incluye especialmente a las niñas y los niños, requerimos motivación. Ésta en la infancia depende mucho, muchísimo, de los adultos.

Los scouters de manada debemos estar muy atentos a qué les pasa a los niños, si los entusiasma lo que están viviendo en la manada, si tienen ganas de algunos juegos, si su especialidad les "llena". Y ponerse las pilas cuando baje el entusiasmo.

Si bien es cierto que la permanencia en la manada es en última instancia una decisión personal de cada lobato y lobezna, también es cierto que depende mucho de que los viejos lobos que la motivación permanezca: hablar con ellos, felicitarlos, reconocerlos, llamarlos a su casa.

Es imperdonable que pase el tiempo y un scouter no sepa por qué un chico o chica ya no va a la manada, mucho más que ni siquiera haya intentado algo por renovar la vitalidad de su compromiso.

Si alguien no tiene tiempo o no tiene ganas de todos los días salir un poco de sí mismo para pensar en sus lobit@s, llamarles, preparar algo especial para cada uno individualmente, entonces no está en el momento de ser viejo lobo.

28.7.08

Para los nuevos viejos lobos


Muchas veces cuando un nuevo viejo lobo entra a la manada se siente un poco perdido: ¡y ahora qué hay que hacer!

Pensando en dar una respuesta a tan común situación, la Asociación Nacional de Scouts de Panamá preparó un texto para los noveles scouters de manada: El ciclo inicial en Seeonee: los primeros pasos en una manada de lobatos y lobeznas.

Este texto, con buenas ideas para el primer ciclo de programa en el escultismo, la pueden bajar de la propia página de la Asociación panameña: http://www.scoutspanama.org/docs/publicaciones/ciclo_inicial_manada.pdf.

A disfrutar de este buen material...

Para cuando falten actividades para hacer con la manada


Navegando por sitios scouts fui a dar con la página de la Asociación de Scouts de Panamá y me he encontrado algunas publicaciones que pueden ser de gran utilidad para los viejos lobos.

Una de ellas es denominada Cien ideas para reuniones de la sección menor, publicada por la Comisión Nacional de Programa de aquella Asociación, no encontré la fecha por ningún lado.

Como el vínculo de la página de la Asociación al archivo del documento aparece con errores, me di a la tarea de buscarlo por otros rumbos de la red y lo encontré en un sitio que también recomiendo a todo mundo: el del Pueblo Libre, de Chile. Pueden tener acceso al documento en esta url: http://www.pueblolibre.cl/site2.0/documentos/Lobatismo/100_ideas_reuniones_lobatos.pdf.

Origen del lobatismo

Les presento un texto escrito por Bagheera del pueblo libre en el sitio www.pueblolibre.cl el lunes 3 de marzo de 2008.

En el año 1914 el mundo estaba siendo sacudido por la Gran Guerra, el primer gran conflicto mundial. Centenares de scouters estaban en el frente de batalla y el escultismo estaba estancado, luego de un sensacional avance desde 1907.
Baden Powell aprovechó esta situación para desarrollar un proyecto para scouts menores de 11 años. Desde un inicio, los más pequeños desearon integrarse al movimiento, pero no había una propuesta concreta para ellos.Algunas tropas habían intentado formar grupos de "junior scouts" pero los resultados no habían sido satisfactorios. El libro "Scouting for boys" no era apropiado para ellos, así como el "Aids to scouting" no había sido apropiado para los scouts (*).
BP analizó con Percy Everett un método educativo para los "junior scouts", llegando a la conclusión que:
"El nombre Junior Scouts nunca servirá como nombre permanente. Nunca pensé mantenerlo, pero servirá para uso preliminar al explicar el movimiento. Debemos inventar un nombre que guste a los chiquillos... originalmente pensé en lobatos, cachorros, potros o jóvenes scouts".
La respuesta para el nombre vino de la obra que nuestro Jefe pensó en usar como base de programa: "El libro de las tierras vírgenes", de Rudyard Kipling.
A Kipling lo unían varios lazos con BP y el escultismo: en primer lugar tenía a un hijo dentro del movimiento, era autor de la canción oficial de los "boy scouts ingleses" y era iniciado en una vieja Orden fraternal, al igual que Baden Powell. Por estas razones, Rudyard Kipling aprobó el uso de su libro para el desarrollo del lobatismo. Recordemos que BP también había utilizado un personaje de Kipling para uno de los capítulos del "Scouting for boys".
El 2 de diciembre de 1916 se publicó "The Wolf Cub´s Handbook" (Manual de Lobatos) de Baden Powell, donde se explicaban las líneas generales de la nueva unidad scout.
A pesar de la guerra, el lobatismo se desarrolló con rapidez y al terminar su primer año, poseía 30.00 integrantes. Una de sus ventajas era que sus líderes podían ser mujeres y esto, durante la guerra, fue fundamental.
Pocos años más tarde, en el Jamboree Mundial de Olympia (1920) se confeccionó una jungla tropical, inspirada en los libros de Kipling, con cabañas primitivas y casas de tronco. Ese día, centenares de lobatos realizaron un gran clamor que hizo temblar el techo del recinto.
Hoy, la llama del lobatismo sigue viva.

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(*) "Aids..." fue escrito por BP para los soldados, pero tuvo una gran aceptación entre los adolescentes. Por esta razón BP escribió "Scouting for aids"

Las ceremonias de manada son ritos.... y educación, pero para niños

Fotografía tomada de www.scout.org

Las celebraciones en la pedagogía scout nos sirven para festejar que quienes jugamos el juego del escultismo verdaderamente vamos dando pasos en el compromiso libremente aceptado de ser siempre mejores para estar siempre listos para servir a nuestro Dios, nuestra patria y nuestro hogar.

Para más de uno podría bastar una palmada en el hombre y un "te luciste, compañero" o un "qué bueno que vas adelante"... ¿es suficiente?

Las ceremonias son rituales sociales

Las ciencias sociales han avanzado mucho en el estudio de las acciones rituales en las diferentes culturas y los diferentes tiempos. Hoy es sabido con cierta claridad que los ritos son actos de carácter fuertemente simbólico cuya función es permitir a los miembros de una comunidad "ver, gustar, oír, oler, palpar" las cosas importantes de la vida.

He aquí el primer cometido que tiene todo scouter que encabeza una ceremonia: diseñar de tal forma este espacio que en verdad le diga algo al celebrado y a todos los que se involucren en el acontecimiento.

Muchos recordamos todavía en la edad adulta nuestra ceremonia de promesa o el pase a alguna sección o la entrega de una insignia muy preciada, y eso fue gracias a que nuestro scouter se esforzó de alguna manera de hacer un momento muy especial para nosotros.

Para ello, como recomendó BP en su manual de lobatos, hay que tener un plan trazado y tener las cosas preparadas para que todo funcione en tiempo y lugar.

Hace poco acudí a una ceremonia. No era para un niño, sino para un scouter. Al final de la junta recibió la cinta de liderazgo para su sección, sin recibir los demás símbolos del cargo y sin mayor enfasis: a lo mejor él lo vivió de manera especial (aunque ahora tendrá que ir a comprar su cinta de misión y su cordón), pero hubo muchachas y muchachos que no se enteraron ni de qué pasó... Se perdió la oportunidad de hablar a la sección a través del ritual.

La dimensión educativa de las celebraciones en el escultismo

Con elementos repetitivos, quien participa en un rito debe poder experimentar que algo importante está pasando y que eso de alguna forma nos involucra a todos.

El segundo cometido, a mi parecer, que tiene un scouter al respecto es el de garantizar que la ceremonia tenga mucho que ver dentro del marco de TODA la acción educativa que propone en su sección.

Para ello es muy importante que en efecto, la ceremonia sea el fruto del compromiso de la chica o el chico y por ello él o ella tienen que estar al tanto de lo que va pasando en su vida scout, muy especialmente en lo relativo al asunto en cuestión: el desarrollo de su progresión personal, el lograr una especialidad que puede poner al servicio de su sección o de alguien más, el compromiso libre y voluntario que quiere adquirir o el pase a una nueva etapa de su vida.

Hoy se aconseja que para hacer significativo el momento ceremonial, se haga participar de diversas maneras al celebrado y que su scouter le ayude a ver las cosas que ha realizado o está realizando y que nos llevan a festejarle: ayudarle, pues, a que tome conciencia de que va siendo cada vez más autónomo, cada vez más responsable, cada vez más coherente con los valores que quiere vivir.

Y esta dimensión educativa sólo se logra con presencia continua del scouter en la vida de los chicos de su sección, con mucho diálogo y con una fuerte vida de grupo.

Alguna vez me tocó ver un akela que entregó una insignia de especialidad de primeros auxilios y en un momento de la ceremonia pidió a los niños que dijeran cuando habían visto a la lobezna festejada ayudar a los demás con un vendaje o con alguna cosa así y un par de cachorros dijeron que la lobita les había enseñado a usar la pañoleta para un cabestrillo, otro dijo que cuando se raspó ella y raksha la había lavado, le habían puesto alcohol y merthiolate y una curita... Y así ella reflexionó (en el sentido más clásico de la palabra) sobre sus aprendizajes para servir. Y se produjo un bello acto educativo.

27.7.08

Formación por seisenas


Como he comentado en un texto anterior, el documento que publicó la Subcomisión Nacional de Manadas de la ASMAC en 1987 sobre formaciones y ceremonias en manada, señala que hay dos tipos de formaciones: las básicas y las de apoyo.

Las primeras son la de círculo, ya referida en el texto anterior, y la de seisenas, que en esta ocasión describiré brevemente.

Esta es una formación típica: las seisenas quedan formadas en hileras paralelas frente al scouter que los ha llamado, como se muestra en los gráficos que la ilustran.

La llama un viejo lobo con el tradicional grito de "Manada, manada, manada" y los brazos en paralelo al frente, como señalando las hileras. Los lobatos lobeznas responden también gritando "Manada".

Los seiseneros se forman a una distancia aproximada de tres metros del scouter que los llamó. Viendo del viejo lobo hacia la manada, la primera seisena en orden alfabético se forma a su izquierda (generalmente la seisena amarilla); visto desde los lobatos, la primera seisena está en el extremo derecho de la formación.

Cuando el scouter baja los brazos, las seisenas que han completado su formación hacen su grito tradicional (color de seisena siempre!... ¡Lo mejor!).

Esta formación se utiliza para iniciar juegos (especialmente los de relevos), para contar historias, para dar indicaciones y, también, para iniciar un recorrido.

Sugerencia

Cuando haya más de un viejo lobo con la manada es recomendable que sólo quien ha llamado permanezca el frente, los demás scouters son de gran ayuda si se forman en la parte trasera de la formación, para colaborar en que los lobatos puedan concentrarse en la actividad, o charla o el asunto que se trate en esta formación.

26.7.08

Los momentos más importantes de la vida de un lobato o lobezna (para celebrar con ceremonias)


Supongo que ya lo he dicho en otras ocasiones, pero me permitiré el lujo de redundar: una de las cosas que más me gusta de un grupo scout que sí tenga método y programa educativo scout es que en él sí nos fijamos en las cosas buenas que los niños, los jóvenes y los adultos hacemos... ¡y las celebramos con gusto! Por eso tenemos fiesta de fin de ciclo, fiesta de fin de año y ceremonias de acontecimientos importantes.


Los momentos más importantes en los cuales celebramos la vida de selva un lobato o lobezna, y que por ello ameritan ceremonias bien hechas, son:
  • La investidura, o cuando recibimos al cachorro o a la cachorra formalmente en el grupo y le entregamos todos los distintivos de pertenencia a él y a la asociación: pañoleta, escudo de grupo, sector y su primera insignia de progresión personal.
  • La promesa, que en toda la historia del escultismo ha sido considerada un momento sumamente especial de la vida scout completa.
  • El paso a la tropa, en el cual recogemos todas las andanzas de nuestros cachorros, los despedimos como se merecen y cambian de piel.
  • Cuando actualizan alguna de las etapas de progresión personal.

Menor importancia tiene la consecusión de especialidades, aunque no por ello son menor motivo de alegría y de cierta formalidad.

Un verdadero cariño fraterno nos unió al Chapu


Al Chapu lo conocí el día que llevé a mis hijas al grupo scout que nos recomendaron. Él era el Akela de la manada de la Rivera del Río Waigunga, del grupo 3 y antes había sido el jefe de la manada del grupo 7, hasta que por diferentes motivos tuvo que cerrar.

Con el paso de los sábados lo fui conociendo un poco más. En un momento de esos que suceden por lo arranques que muchos ex-scouts padecemos cuando llevamos a nuestros hijos a un grupo activo, me convertí en el Baloo de la manada. Entonces fue surgiendo la amistad.

Hace un par de días murió el papá del Chapu. Invité a Adriana, mi hija mayor, a que me acompañara y nos fuimos al velatorio. Cuando llegué sentí cierta felicidad, nada sádica, por cierto: la familia estaba muy tranquila, viviendo con fe la despedida de su patriarca. Y con ellos estábamos muchos scouts: ellas y ellos que el Chapu fue conociendo desde que era un tropero que fue a hacer servicio para el acto que el Papa Juan Pablo II realizaría en el Valle de Chalco, en una de sus visitas a México y cuya inquietud permanente le valió el sobrenombre de Chapulín.

Eso conforta: saber que en el escultismo no sólo aprendemos cosas que nos permiten ser buenos ciudadanos, sino que nos da amistades, hermandad, un gran cariño que sale a flote cuando los momentos fuertes de la vida nos convocan, como lo fue la muerte del papá del Chapu.

Mi fe cristiana me dice que ese es un verdadero regalo del amor de Papá Dios: nos da hermanos a quienes amar... y el escultismo nos los acerca.


jrrv, julio 2008

24.7.08

Historia de los Scouts.: Vera Barlcay, La primera Akela de la Historia

En el blog de Carlos Edmundo Herrera Otoya me encontré este texto que puede ser interesante...

http://historiadelosscouts.blogspot.com/2008/07/vera-barlcay-la-primera-akela-de-la.html

23.7.08

Formaciones básicas para manada: círculo de parada

En un documento que publicó en 1987 la Subcomisión Nacional de Manadas de la ASMAC están contenidas algunas indicaciones para hacer formaciones en manadas, a las cuales considera parte esencial del marco simbólico de esta sección.

Según este documento, desde el punto de vist de la utilidad de las formaciones, hay dos tipos de formaciones: las básicas y las de apoyo.



Las primeras son las de mayor uso en la manada: durante juntas en el cubil, en acantonamientos, en cualquier cacería. Las segundas, se utilizan ocasionalmente, a discresión de los viejos lobos.


Círculo de parada: primera formación básica

Desde tiempos de BP el círculo de parada es una de las formaciones más socorridas por los lobateros y lobateras. Nótese que se denomina círculo de parada y NO consejo de roca.


La formación consiste, como su nombre lo dice, en un círculo.


Cómo se realiza

La formación se realiza de la siguientes manera:
  1. El scouter llama con el tradicional grito de "Manada, manada, manada" al cual los lobatos y lobeznas responden: "Manada". Para que los pequeños sepan que se llama a círculo el scouter está parado en posición de firmes, con las manos claramente pegadas a los costados.



  2. La manada se congrega en torno al scouter. El seisenero de la primera seisena en orden alfabético queda frente a su viejo lobo y los demás se forman a la izquierda. Los niños y las niñas tienen que estar unidos por los hombros, en un círculo compacto alrededor del scouter.

  3. Quien ha llamado a la formación extiende los brazos con los puños cerrados, indicando a la manada que abran el círculo, pero tomados de las manos; esto con la finalidad de que el círculo conserve su forma.

  4. El scouter baja los brazos y entonces los seiseneros hacen sus gritos de seisena.

  5. El scouter se coloca en su lugar, que es entre el seisenero de la primera seisena y el subseisenero de la última.

Algunas consideraciones sobre el llamado y la realización de la formación

Hay muchas manadas en las cuales los viejos lobos acostumbran gritar: "Hombro con hombro" y piden a los lobitos y lobitas que les contesten "garra con garra" entre el paso dos y tres.

También es costumbre que el viejo lobo pueda quedarse en medio del círculo para tener mejor control "escénico" de la formación y pueda con facilidad dar instrucciones.

Si hay más de un viejo lobo en la manada, los restantes viejos lobos pueden permanecer fuera del círculo para colaborar a su efectiva realización. Se integrarán a su lugar, cuando el dirigente los llame.

Usos de la formación

En la tradición del lobatismo, se ha aconsejado utilizar esta formación para iniciar y cerrar las juntas de la manada, para realizar ceremonias, para hacer el gran aullido (o gran clamor), para cantar, para hacer juegos.

La promesa de un lobezno, según BP (sexta dentellada del Manual de lobatos)


El lobezno es conducido al centro del Círculo de Parada. Su gorra se coloca a los pies del jefe de manada, que está de pie enfrente de él.

El jefe de manada le pregunta: -¿conoces la ley y la promesa de los lobatos, el gran clamor y el saludo?
El lobezno: -Sí, señor, los conozco.
El jefe de manada: -¿Cuál es la ley?
El lobezno: -El lobato escucha y obedece al viejo lobo. El lobato se vence a sí mismo.
El jefe de manada: -¿Estás preparado para hacer la solemne promesa de los lobatos?
El lobezno: -Sí, señor, lo estoy. "Yo prometo hacer siempre lo mejor por cumplir mis deberes para con Dios y la patria. Obedecer la ley de la manada y hacerle una buena acción a alguien cada día.
El jefe de manada: -Confío en que harás siempre lo mejor por guardar esta promesa. Ahora ya eres lobato y miembro de la gran hermandad de los scouts.

El jefe de manada le da sus insignias, le coloca la gorra -cuidando que le quede en su lugar- y le estrecha la mano izquierda. El lobato se pasa las insignias de la mano derecha a la mano izquierda y saluda al jefe de manada con la mano derecha. Luego se vuelve hacia el resto de la manada y saluda. Se queda firme por un momento mientras la manada le devuelve el saludo como muestra de que es bien recibido en ella. En seguida se incorpora a su seisena.

La ceremonia termina con el gran clamor, en el que el parchetierno toma parte por primera vez.

Baden Powell, Manual de lobatos, editorial Scout, México 2005, p 51.

22.7.08

http:/www.larocadelconsejo.net: un sitio para compartir de lobatismo y de todo un poco en el mundo scout


Cuando acepté formar parte de la Manada de la Rivera del Río Waigunga y me integré como Baloo, me puse a buscar páginas scouts. Visité muchísimos sitios hasta que me encontré con la Roca del Consejo, lugar cibernético del que me enamoré inmediatamente.


A diferencia de muchas páginas que son una especie de "tríptico publicitario" que puedes mirar pero que no permite participar, La Roca es un sitio interactivo, pensado para que scouts de todas partes se integren a él y puedan compartir sus preguntas, sus dudas, sus aportes.


Comenzó siendo un foro sobre lobatismo. Los foros son lugares en los cuales se pone un tema y todo mundo puede opinar sobre él, con tal que cumpla las reglas de la "netiqueta". Éste, en concreto, fue dado a luz por un grupo de scouts españoles y ahora tiene más de quinientos usuarios registrados.


Allí pude conocer algunas tradiciones, algunas actividades que se hacen en manadas españolas y de otros países latinoamericanos.


Con el paso del tiempo, el concepto creció y ahora La Roca del Consejo ofrece cuatro espacios para todos los amantes del lobatismo y del escultismo: el foro, un album para compartir fotografías, un blog para compartir temas más serios y mejor redactados con relación a la vida del escultismo y una wikipedia de escultismo (estas enciclopedias que los usuarios van construyendo entre todos).


Invito a quien quiera a que se dé una vuelta por la roca y si le gusta, pues que de plano se haga miembro de esta comunidad electrónica y hasta comparta las cosas interesantes que ha encontrado en su vida como scout o scouter: http://www.larocadelconsejo.net/


jrrv, julio 08

21.7.08

BP: ceremonias de manada

Ceremonias: Las dos ceremonias grandes de los lobatos son la promesa y su paso a los scouts. Éstas nunca deberán llevarse al cabo en forma accidental. Trazad de antemano un programa de acuerdo con la sexta y la décima dentelladas [se refiere a las dentelladas o capítulos del Manual de lobatos]. El jefe de manada podrá hacer las variaciones que juzgue sugerentes para él y sus lobatos, siempre y cuando los lineamientos generales coincidan con los descritos en esas dentelladas y que se tenga especial cuidado de que las ceremonias puedan ser entendidas por los lobatos. Un programa demasiado complicado generalmente significa un programa molesto. La sencillez y la solemnidad deberán ser las notas salientes en las ceremonias de los lobatos.

Baden Powell, Manual de lobatos, editorial scouts, México, 2004 (segunda reimpresión e la sexta edición), p 247

20.7.08

No se pierdan la flor de lis más grande del mundo 2008

En la página de la ASMAC http://www.scouts.org.mx han publicado que los próximos sábados 2 y domingo 3 de agosto tendrá lugar la ya tradicional actividad denominada "La flor de lis más grande del mundo", formada en la explanada de la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México (Zócalo).

La figura de la flor de lis es formada con latas, que posteriormente son vendidas para reciclaje y el producto de la venta es donado a alguna institución....

No te quedes sin participar de esta actividad ya tradicional entre los scouts de México.

¡Qué bonitos se ven formaditos!

En aquella prehistoria gloriosa, cuando disfrutaba las cacerías y dentelladas de los lobatos de la manada del grupo 4 de Toluca, con frecuencia escuchaba a la mamá de un compañero de cubil decir algo así como: ¡Qué bonitos se ven formaditos! ¡Lo bueno es que aquí les enseñan disciplina!

Pasaron muchas lunas, recorrí muchos territorios, viví muy diversas cacerías, hasta que un día mis cachorras me dijeron: "Papá: nos invitaron a los scouts; ¿nos llevas?"

Así fui a dar a la Manada de la Rivera del Río Waigunga, la del grupo 3 de Puebla. Era mi reencuentro con el Seeonee, ¡y había tantas cosas diferentes después de 25 años!

Ese día los cachorros y las cachorras de la manada fueron al templo de San Francisco, en Puebla, donde el grupo 26 había organizado una feria de especialidades. ¡Todo lo que veía era tan distinto!

Al final de la jornada Akela llamó a formación. Los lobatos y las lobatas hicieron el famosísimo círculo de parada. El viejo lobo los tenía a todos derechitos, bien uniformaditos... Y escuché la voz femenina que me hizo pensar que no todo era tan diferente: "¡Qué bonitos se ven formaditos! Lo bueno es que en los scouts les enseñan disciplina". Fue como entrar en el túnel del tiempo.

¿Los scouts sirven para disciplinar?

Yo creo que en los 100 años de escultismo ha habido una tendencia a pensar que este movimiento sirve para poner en orden a los "indisciplinados".

En esta óptica, uno de los indicadores de que se logra la pretendida "finalidad disciplinaria" es que los cachorros se formen rápida e impecablemente. He visto viejos lobos vociferando, llamando a formación una y otra vez hasta que los lobatos y lobeznas logran formaciones rápidas, en perfecta alineación, como de pequeños soldaditos: los scouters ven satisfechos sus esfuerzos en tanto los padres de familia sonríen al pensar que han encontrado el lugar para que vuelvan buenos a sus hijos.

¿Para qué sirven las formaciones?

Tal vez lo que pienso no satisfaga a muchas personas, pero estoy profundamente convencido de que las formaciones en la vida scout sólo sirven para dos cosas: para poder dar alguna instrucción y que ésta pueda ser atendida con claridad y para poder iniciar fácilmente los juegos y actividades atractivas, desafiantes, útiles, recompensantes y seguras que son el motivo por el cual los niños y los jóvenes frecuentan el grupo scout.

Considero que si no se está en una de estas situaciones ni siquiera es necesaria una formación. También creo que las formaciones lo único que requieren es que una vez hechas permitan o dar instrucciones o jugar y que para ello no es necesario vociferar, ni gritar, ni poner castigos como “la cola de León” y cosas de esas… total, si una sección tarda mucho en formarse son sus miembros los que se pierden la diversión…

Me declaro inconforme con todo aquel scouter que frente a los niños quiera dejar salir el sargento que lleva escondido en el alma y aplaudo a los viejos lobos que saben divertirse con los niños y no dan excesiva importancia a lo que no lo tiene, como exhibir a sus lobitos y lobitas en fastuosas formaciones pseudo-militares.

jrrv, julio 2008

La danza del hambre de Kaa, la serpiente pitón

Un lobato es la cabeza de Kaa y el resto de la manada detrás de él la cola, tomando cada uno al lobato que tiene enfrente, poniéndole las manos sobre los hombros, y siguiendo al que hace la cabeza a donde quiera que vaya, moviéndose todos tan lentamente como les sea posible, y llevando cada quien el paso con el de enfrente. El que va a la cabeza, lentamente se deslizará haciendo en su recorrido la figura de un ocho, y en seguida enroscará su cola en forma de círculo que se va reduciendo poco a poco hasta que da la vuelta para deshacerlo en forma de espiral.

Durante el tiempo que tarda la danza todos los lobatos silban a la vez que caminan sobre las puntas de los pies, sin hacer el menor ruido, de tal manera que el conjunto imite el ruido de una serpiente al arrastrarse sobre el pasto, lanzando de cuando en cuando un silbido más agudo, como lo hacen las serpientes para llamar a sus amigos.

Cuando Kaa ha terminado de enroscarse y desenroscarse, como queda dicho, el guía da la voz de "banderlog", e inmediatamente la serpiente se desbarata y cada lobato corre por su lado, imitando a los monos.

Uno correrá en cierta dirección, como si fuese a atender un asunto urgente, deteniéndose repentinamente y sentándose con la cara hacia el cielo. Otro bailará en cuatro pies dando vueltas y más vueltas sin objeto real ninguno. Otro tratará de agarrarse la cola. Otros treparán por las ramas imaginarias sentándose en ellas a rascarse. Uno se pondráa correr dibujando la figura de un ocho. Otro correrá en cuatro pies hacia un enemigo ilusorio, sentándose de repente a contemplar las estrellas. Otro correrá detrás de su propia cola, caminará unos cuantos pasos y luego volverá de nuevo a correr tras de su cola. Otro estará haciendo cabriolas, cogerá una paja imaginaria, la examinará, y luego volverá a sus cabriolas, de nuevo. Otro más, pondrá la cabeza entre los talones y se sentará a rascarse. Otro caminará rápidamente como si fuera en pos de un negocio importante; se detendrá, y olvidando a dónde iba, se rascará la cabeza y volverá rápidamente en una nueva dirección, repitiendo esto una y otra vez.

Todos harán las boberías que les vengan a la cabeza, exactamente como lo hacen los monos; pero no se fijarán en lo que están haciendo los demás. Estarán constantemente ocupados y harán diferentes cosas por turno. Durante todo este tiempo seguirán dando continuamente la llamada de los monos. El cuadro será un estado de confusión en que todos hagan cosas bobas sin finalidad ninguna y al mismo tiempo lanzarán el grito de los monos: "¡Gurrukk, gurrukk, jau, jau, gurrukk!"

De repente, el guía gritará "Kaa", los monos se hielan de espanto, pues saben perfectamente lo que hará con ellos este terrible enemigo. El lobato que hace de cabeza de Kaa se pone de pie con los brazos extendidos hacia el frente, la cabeza agachada y lentamente balancea su cuerpo de un lado para otro. Silba una vez y los monos dan un paso involuntario hacia adelante y entonces la serpiente señala a uno de ellos.

La aterrorizada víctima se arrastra pasando por en medio de sus piernas dando a entender que se lo han engullido y en seguida se coloca detrás del Guía, con las manos sobre sus hombros como en la primera parte de la danza. Hasta una docena de monos son engullidos de esta forma, uno después de otro, para formar de nuevo el cuerpo de Kaa; los otros lentamente se van colocando a la cola para completar el cuerpo de la serpiente. Cuando todos están ya reunidos, la serpiente se mueve pesadamente formando un círculo y por fin se echa al suelo y se duerme para hacer la digestión de la buena comida que se ha dado. Esto último se lleva a cabo tirándose al suelo uno detrás de otro, principiando por el guía, descansando cada lobato su cabeza sobre el compañero de enfrente. Al grito de ¡manada, manada, manada! todos se ponen de un salto sobre sus pies, gritando la respuesta ¡manada! Y forman en seguida el círculo de parada.

Baden Powell, Manual de lobatos, 38-40

18.7.08

Se acaba el tiempo para inscribirse en el ENDIMAN!!!

Coatepec Harinas, en Veracruz, está engalanándose para recibir a los viejos viejos lobos y a los nuevos viejos lobos que se reunirán una vez más en torno a la roca del consejo: es la reunión nacional de dirigentes de manada, mejor conocido como endiman.

Si has estado pensando en participar, pasa del pensamiento a la acción: inscríbete y alista la mochila. El programa que habrá permitirá celebrar, compartir, aclarar dudas, aportar experiencias.

Quedan pocos días para registrarse... para mayores informes consulta la convocatoria en la página de la Asociación de Scouts de México, A. C. (www.scouts.org.mx).

Todos listos para participar... ¡Buena caza!

16.7.08

¡Ya no aguantamos a Pablito!

Esta anécdota me la contó Carlos Vivas, de la provincia Yucatán, de México:

En su manada (hace algunas lunas, claro), había un niño, buen niño, como muchísimos que llegan a nuestras selvas escultas... Lo que hacía peculiar a este pequeño, Pablito para mayores señas, era su desmedida timidez; "cero expresividad, pues".

El asunto no era menor, puesto que los viejos lobos llegaron no sólo a preocuparse, sino a ocuparse del caso.

Decidieron, como suele hacerse en la vida scout, recurrir a un muy socorrido pero no por ello poco efectivo remedio: darle responsabilidades. Crearon una nueva seisena, lo pusieron al frente y poco a poco lo fueron haciendo sacar "el líder que llevaba dentro".

Al correr del tiempo un día llegó al Akela Carlos la noticia de que a Pablito ya no se le aguantaba ni en la escuela ni en la casa: ahora no se callaba, no dejaba de hacer diabluras. Y como se imaginarán en este viejo lobo y sus compañeros de selva brotó una secreta sonrisa de satisfacción: ¡vaya que el escultismo puede ser importante en la transformación de las personas!

7.7.08

Acompañamiento de la progresión personal

Tal vez una de las cosas más difíciles para todo viejo lobo es evitar a toda costa que su labor se reduzca a la organización de juegos y diversión para sus lobitos y lobitas y asegurar que la experiencia scout para los pequeños sea realmente educativa. ¡Nos negamos a quedar reducidos a ser depósito sabatino de niños!


Una de las herramientas más importantes con la cual contamos los scouters es la que en nuestro lenguaje se llama progresión personal.

Una mirada a los orígenes

Cuando uno lee el Manual de lobatos de Baden Powell, especialmente en la última parte, aparece claramente que él tenía un programa educativo y que la labor del scouter era despertar el apetito del aprendizaje en los pequeños lobos... De paso: un programa muy completo, atento a la formación del carácter, del cuerpo, de la ciudadanía (civilidad, civismo).

Desde este punto de vista el asunto consistía en que a través del gran juego del escultismo el niño o el joven quedaran enganchados para ir haciendo un camino personal de crecimiento, de tal suerte que en el transcurrir de su vida scout fueran cayendo en cuenta de todo lo que ellos habían ido aprendiendo de sí, del mundo para poder ser fieles y útiles a su Dios, a su patria, a su hogar.

De múltiples formas el fundador de los scouts habla de esto en el Manual referido y en toda su bibliografía.

Reflexiones para nuestro hoy

Los clubes de campismo, los grupos como Éxodo (fundación de los misioneros del Espíritu Santo) no son escultismo: saber hacer nudos, dormir a la intemperie, construir refugios y cocinar sin utensilios son actividades que bien puede hacer un militar, un alpinista, etc... pero no por eso son "escultas".

Los scouts hacemos todos eso, porque nuestro método consiste -entre otras cosas- en aprender haciendo en contacto con la vida al aire libre... pero no basta: también tenemos una propuesta para que cada quien -niña o niño, muchacho o muchacha- pueda saber que crece integralmente como persona, porque tiene un PROGRAMA de trabajo personal y grupal que le permite ser mejor para consigo mismo, para con los demás, para con su patria y su Dios.

La progresión personal es PARTE FUNDAMENTAL de la vida scout. Y los educadores en este movimiento tenemos razón de ser única y exclusivamente para motivar, animar a niños y jóvenes a que enfrenten retos, en especial los retos que se desprenden de los objetivos educativos que ellos pueden asumir para ser siempre mejores, para estar siempre listos, para servir.

A más de uno que leyera estas líneas le puede parecer superfluo esto, pero al ir conociendo grupos en varios lugares de la república voy cayendo en cuenta de que es común que se exacerben algunos rasgos del método scout, en especial los que tienen que ver con campismo y se abandone la difícil, ardua y muy requerida de paciencia tarea de acompañar el progreso educativo de las personas... ¡la progresión personal!